Se desprende la apreciación de lo que viene arrojando cada domingo de automovilismo mayor en la Argentina 2012. El pibe longilíneo, nacido en Del Viso, iniciado en el karting apoyado por papá que los fabrica hasta el día de hoy, se percibe entre los entusiastas, los fanáticos y los entendidos, acentúa la sensación que marca diferencias con los contertulios con los que comparte las pistas ya sea en Turismo Carretera, Súper TC2000 o Top Race.
Casi infalible frente al volante que le toque en suerte, veloz, seguro y prolijo, el Misil (como le gusta que lo llamen), es la referencia actual en el mundo fierrero. A quien las miradas no pueden dejar de seguir, ya sea en el Chevrolet de Turismo Carretera que a tres fechas de la finalización del campeonato, lidera la Copa de Oro. O bien arriba del Toyota Corolla de Súper TC2000 donde dominó a voluntad hace unos días en las calles de Santa Fe para lograr su 3ª victoria anual y ponerse rueda a rueda en la pelea por el título (salió campeón de TC2000 en 2006-2007-2011), como también sobre el prototipo Ford Mondeo de TopRace.
Astuto, con una fortaleza mental y frialdad que escasos colegas pueden empardar, Rossi hace lo que debe hacer sobre un auto de competición de manera impecable y, la frutilla del postre viene en forma de triunfos.
Prolijo tanto arriba de los autos como abajo, hasta supo tomar clases de teatro años atrás para entender la mejor forma de expresarse y comunicarse.
Es este Matías Rossi catapultado a la cima del mundo de la velocidad autóctono; a la cabeza de una generación que se instaló para continuar la brillantez aún vigente si bien en paulatina retirada de los Fontana, Ortelli, Silva, Gurí Martínez. Es la hora de la generación nueva ya instalada que el Misil integra en especial junto a Pechito López, el cordobés que le pisa los talones, a los que se suman otros pibes que ya viajan a la par con un par de añitos menos como Agustín Canapino, Mauro Giallombardo, Néstor Girolami, Facundo Ardusso, Mariano Werner, Juan Bautista De Benedictis.
Y no sólo se ha hecho fuerte manejando Matías; con mucha convicción defiende sus posturas y forma de pensar. Y no se calla como la inmensa mayoría de los corredores del ambiente. Dice lo que piensa, ¿Por qué no recordar a Traverso, si bien el Flaco mucho más controversial y contradictorio?.
Estandarte de los reclamos que han proliferado por los inoportunos y nada felices cambios reglamentarios aplicados por la ACTC, en plena temporada a favor de la marca Ford, supuestamente en desventaja, Matías ha reiterado a quien quisiera escuchar su más absoluta disconformidad. Actitud que pese a que ha fastidiado a los popes de la ACTC, no ha depuesto. “Nadie de la ACTC me vino a buscar, estoy aguardando que me vengan a buscar, ¿que hice de malo?, que me lo digan, ¿quejarme de la barbaridad que hicieron al cambiar el reglamento, bueno, lo dije porque soy así, siempre digo lo que siento. Me pregunto: ¿yo me equivoqué?, no, fueron ellos con lo que resolvieron el cambio, fue una verguenza, no me equivoqué yo, fue la ACTC en todo caso. por lo tanto si me preguntan por lo que digo, les diré lo que siento, lo que hicieron con el reglaamento fue una barbaridad". “Y ojo –aclara- no tengo nada contra la ACTC (dicho sea de paso, recibió un apercibimiento por la controversial maniobra ante Canapino en la última carrera en San Luis), también me parece una barbaridad que en Súper TC2000 hayan autorizado a probar cuando no se puede, a los equipos Renault y Chevrolet”.
Es el Misil Rossi o también el Granadero. Maneja como los dioses y va de frente, arriba o abajo del auto. El mejor, el más completo. ¿El nuevo Traverso?.
via http://www.diariopopular.com.ar
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