Cuando los equipos de Formula 1 pactaron el cambio de los actuales motores atmosféricos de tipo V8 por los futuros V6 turbo Ferrari fue una de las primeras en aceptarlos bajo la premisa de que no supondría un gran problema adaptar su filosofía de las carreras a sus vehículos de calle. Ésta fue una de las primeras informaciones que ponían sobre la pista de que la escudería de Maranello podría estar preparando una revolución en su gama comercial(si es que así podemos calificar a sus deportivos de ensueño).
Por otro lado, desde la segunda generación del "modesto" California se han escuchado rumores de que sobre éste se desarrollarían los primeros muletos o prototipos puesto que, parece ser, será el primero en ser ofrecido en los concesionarios con la nueva familia de motores turboalimentados. Y es que no es de extrañar que Ferrari adopte la solución "ecológica" que otros fabricantes como McLaren Automotive en su MP4-12C ya utiliza: un motor 3.8L biturbo, o su eterna rival, Porsche, la que también ofrece sus motores turbo y que incrementan sustancialmente la potencia de sus 911.
Como decíamos, a nadie tiene que asustar esta vuelta al turbo y decimos regreso porque sirva como ejemplo un mito de la marca: el legendario F40 ya montaba un motor de menos de tres litros turboalimentado por partida doble a final de los años 80.
No es un secreto que Ferrari ya está desarrollando, en colaboración con otras marcas del grupo FIAT como Maserati, los motores de V6 de 3L turbo y los V8 3.8L biturbo que su hermana pequeña ya utiliza por lo que volveríamos a cubicajes de décadas pasadas, como el Ferrari 360 de principios de 2000 pero añadiendo al menos un turbo.
Más por menos
En los últimos años vemos una imparable ascensión en cuanto a prestaciones tanto en vehículos del día a día como los grandes deportivos y es que parece que hay una batalla continua por mostrar el coche más potente que el de la marca rival.
Por otro lado hay otra imparable caída en los consumos incluso de estos coches cuyos precios parten de las seis cifras. El uso de materiales ligeros, la disminución del volumen de los motores, la inclusión de turbos e incluso de sistemas eléctricos de apoyo como los híbridos y más concretamente paraFerrari con su hipercoche, el LaFerrari, es una realidad que muestra el doble juego de marketing: por un lado seguimos demostrando que nuestros coches son los más potentes, rápidos, eficaces en su lucha contra el crono pero por otro lado también lo son en cuanto al consumo de carburante, reduciendo tanto lo que es la cantidad de gasolina consumida como la emisión de gases nocivos. Es decir, más por menos.
Se desconoce el momento concreto para la presentación de la nueva generación de los sustitutos de los V8 actuales, el 458 Italia y el California pero, siguiendo la cronología marcada en los últimos años y tras la presentación del Speciale, no tardará en llegar, posiblemente para finales de 2014 se presente el próximo Ferrari de "acceso" para que en 2015 conozcamos el reemplazo del último motor de ocho cilindros en V y 4,5 litros de capacidad atmosférico como el del cuatro cincuenta y ocho y empezar a verlo por las calles en 2016.
Miguel Lorente - @_MLR_
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