El campeón de Fórmula 1 de la temporada 2012 podría decidirse el domingo en el salvaje oeste americano, pero no hay pistolasy las armas son los coches: el alemán Sebastian Vettel y el español Fernando Alonso afrontan el Gran Premio de Estados Unidos, el penúltimo del año, con todo en juego.
Vettel, que busca su tercer título consecutivo en su Gran Premio número 100, tiene diez puntos de ventaja sobre Alonsoy necesita sacar 15 más que el español para retener el Mundial en sus manos.
Si el alemán lo logra, igualará al argentino Juan Manuel Fangio y Michael Schumacher como los únicos tres pilotos en lograr tres títulos de forma consecutiva. Si no consigue ese colchón de puntos, el título se decidirá en el Gran Premio de Brasil el 25 de noviembre.
El escenario, el nuevo Circuito de las Américas, acogerá elGran Premio de Estados Unidos por primera vez desde el 2007 en un intento de entrar en el lucrativo mercado de la primera potencia económica mundial.
Vettel tienen un «feeling» especial con el país norteamericano: el alemán hizo su debut en la Fórmula 1 en el anterior Gran Premio de Estados Unidos, que se disputaba en Indianápolis. Desde entonces, Vettel sólo conoce éxitos.
El alemán de Red Bull, de 25 años, se convirtió en el Gran Premio de Italia 2008 en el piloto más joven en ganar un certamen y dos años más tarde conquistó el Mundial siendo también el corredor de menos edad en lograrlo. Y en 2011 repitió título.
«Todo va tan rápido. Cien es un número muy grande. Cien Grandes Premios significan mucho: 100 salidas, 100 veces sobreviviendo a la primera curva», señaló Vettel en una entrevista con la página web formula1.com.
«Siento que no entré en la Fórmula 1 hace tanto tiempo. Ello me demuestras que el tiempo vuela cuando haces algo que realmente te gusta y disfrutas».
Al igual que en 2010, Vettel recuperó su déficit de puntos conAlonso ganando cuatro de las últimas cinco carreras y quedando tercero en Abu Dhabi después de salir último.
La suerte no influye
El alemán cree que el campeón de 2012 no subirá a lo más alto del podio por suerte. La temporada es muy larga y al final cada uno está donde merece.
«Sigo creyendo que el piloto que más merezca ganar será el campeón. No tengo ninguna duda que estamos en una muy buena posición, y espero que lo hagamos bien hasta el final y nos merezcamos la gloria», dijo Vettel.
Mientras Red Bull mejoró su coche cuando lo necesitaba, Ferrari se estancó y no gana un Gran Premio desde el deAlemania en julio.
Pero Alonso y su equipo prometen que van a luchar hasta el final.
«Todavía confío porque todo es posible», señaló el jefe de Ferrari, Luca di Montezemolo. «Creo en nosotros más que nadie».
«Depende de nosotros: estamos peleando por el título una vez más en los últimos 15 años y ya hemos visto las situaciones tan difíciles que se remontaron».
Dado el carácter glamouroso de la Fórmula 1, que atrae al jet set en Mónaco, que tiene una carrera nocturna en Singapur y que tiene detrás toda la historia de Monza o Spa, el escenario texano parece todo lo contrario.
Pero el jefe de McLaren, Martin Whitmarsh, lo ve de modo diferente: «Siempre mantuve que la presencia de la Fórmula 1en Estados Unidos es crucial, así que personalmente estoy satisfecho que volvamos».
«Es una oportunidad de oro para que el deporte eche raíces y encuentre un hogar a largo plazo. Desde la perspectiva del negocio, también estamos en el momento adecuado en el lugar adecuado. Es una oportunidad de valor incalculable para el deporte», agregó.
VIA http://www.lavozdegalicia.es
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