A NO AFLOJAR Esteban Guerrieri sigue a la expectativa, aguardando el apoyo que le permita convertirse en piloto de IndyCar

VIA ULTIMAVUELTA A NO AFLOJAR
	Esteban Guerrieri sigue a la expectativa, aguardando el apoyo que le permita convertirse en piloto de IndyCar. Mientras pasan las horas, comienza a pensar en el plan B: sin pensar en bajar los brazos y volver a Argentina, en caso de no llegar a la máxima de los Estados Unidos, podría hacer otro año de Indy Lights en el Sam Schmidt Motorsport, que le abriría la puerta con el mismo sponsor del año anterior. Además, el affaire de Rubens Barrichello con la butaca que quiere el argentino, podría quedar en una prueba y nada más.
¿Premio consuelo? Quizá tenga sabor a poco. Esteban Guerrieri hoy hace fuerza para que aparezca el apoyo desde Argentina, que le permita llegar a la butaca en el KV Racing y correr en la IndyCar. Pero el complicado panorama lo obliga a pensar en alternativas en caso de no lograr el acuerdo con el equipo de Jimmy Vasser. Sabido es que el piloto de Mataderos aún no se resigna, mantiene firme el sueño de competir en el exterior, y por eso el regreso a Argentina, todavía estaría lejos. La alternativa a la IndyCar podría ser otro año en Indy Lights, defendiendo los colores del Sam Schmidt Motorsports, el equipo que lo tuvo en su año debut. La petrolera Lucas Oil, principal sponsor de la escudería, sigue teniendo en cuenta a Guerrieri, por lo que éste no debería buscar apoyo. La alarma más fuerte se encendió durante la semana que pasó luego de conocerse que Rubens Barrichello, ya sin lugar en Fórmula 1, probará el auto del KV Racing en los próximos días. Sin embargo, parece que el brasileño, por ahora, no tendría como objetivo claro quedarse con esa butaca, la misma que quiere el piloto argentino. Las chances de Esteban Guerrieri de llegar a la IndyCar no abundan en este momento, pero el panorama no es del todo oscuro. Como decía una frase, "que el arbol no nos tape el bosque".