La primera de ellas es que los aspirantes a la victoria vuelven a ser los mismos. Los que más claro lo han dejado, el australiano Casey Stoner y los españoles Jorge Lorenzo y Dani Pedrosa, con el estadounidense Ben Spies “un poco” más atrás, pues se nota que le cuesta mantener el ritmo constante de sus rivales.
La situación cambia radicalmente con las motocicletas Ducati de Valentino Rossi y Nicky Hayden. Al final Rossi está con el resto de pilotos oficiales de la categoría, pero es más por su pundonor de gran campeón que por el auténtico potencial de una moto que si bien ha mostrado tener buenos mimbres todavía necesita un laborioso trabajo de evolución que puede condicionar, y mucho, la primera parte de la temporada a los pilotos del fabricante italiano.
Ni Rossi ni Hayden tienen demasiado tiempo así que la labor de los pilotos probadores de Ducati será fundamental para que ambos cuente con un arma auténticamente competitiva con la que plantar cara a sus rivales.
De hecho es tal la desconfianza del italiano que incluso se toma a broma los perennes problemas de Ducati. El italiano colgó hace unos días en su perfil de Twitter una foto que se tomó en su box en Jerez en la que se le ve sosteniendo un muñeco de un extraterreste con un explícito mensaje: “Esperemos que nos salve”. Era, en concreto, uno de los marcianitos que aparecen en la famosa trilogía animada de Toy Story.
Tras ellos estarán todos los pilotos de las escuderías satélite, que en ocasiones podrán propiciar algún susto o variación en la tabla, aunque no parece que vaya a ser lo habitual, como tampoco que, por ahora, las nuevas motos de la categoría CRT puedan estar a la altura de las MotoGP.
El francés Randy de Puniet ha sido el más avanzado de la clase pero lejos de los pilotos de cabeza y salvo que haya cambios más profundos en el reglamento técnico será complicado que ninguna de esas motos pise el podio durante la presente temporada, ni tan siquiera estar entre los cinco mejores.
Lucha abierta en Moto2 y Moto3
En Moto2 y Moto3 la situación variará radicalmente y aunque la lucha será mucho más abierta tanto en la una como en la otra destacan una serie de nombres propios.
En Moto2 con el vigente subcampeón mundial Marc Márquez, plenamente recuperado de su lesión ocular o los también españoles Julián Simón, Nicolás Terol, Pol Espargaró, Tito Rabat o Toni Elías, el primer campeón del mundo de la categoría, que regresa a la modalidad que le encumbró, pero con nombres como el del suizo Thomas Luthi o los italianos Claudio Corti y Andrea Iannone que tendrán mucho que decir durante el año.
Todos apuestan por Maverick Viñales en Moto3 y es que el joven español ya fue el mejor debutante del pasado año y en el presente ya rueda al ritmo de las mejores 125 c.c. de todos los tiempos.
No será el único pues habrá más aspirantes al cetro de la nueva categoría, pero quizás quienes más fuerza cobren durante el año, además de Viñales y los también españoles Héctor Faubel o Efrén Vázquez, por su experiencia, sean los alemanes Sandro Cortese y Jonas Folger, el británico Danny Kent o el portugués Miguel Oliveira. (EFE)
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