Photo by Scuderia FerrariEl equipo Ferrari, pletórico tras su victoria sobre la pista de Sepang, trabaja a toda máquina para recuperar unas décimas preciosas que es sirvan para escalar posiciones y avecinarse a los puestos de cabeza, sin necesidad de situaciones 'particulares' como las del último Gran Premio.
En un mundial donde el dominio de McLaren no se concretiza, por el momento, en una distancia clara en la tabla de clasificaciones, donde una milésima vale varios puestos en la parrilla de salida, e incluso en la línea de meta, Ferrari ha encontrado el camino para comenzar a encaminar un proyecto demasiado 'torcido'.
En Maranello están trabajando a toda velocidad en una reestructuración de toda la parte central y posterior del F2012, para tratar de imitar a un pariente que vive al norte del equipo italiano y con el que comparten corazón.
El equipo Sauber se ha convertido en el modelo a seguir para muchos equipos, el primero en fijarse en el fue Adrian Newey, quien rápidamente supo imitar y usar lo mejor del proyecto del C31 e implementarlo el último día de test en el RB8. Los escapes y las 'formas' de la parte final de los pontones laterales marcan tendencia, y al igual que Red Bull Racing, Ferrari ha decidido 'inspirarse' en sus primos suizos e imitar su estilo para salir de la delicada situación que vive el equipo liderado por Fernando Alonso.
El hecho de que Sauber comparta motor con Ferrari, va a facilitar mucho el proceso de transformación del F2012, puesto que la importante modificación de los escapase variará por completo las ondas de presión d ellos escapes, que tendrán que cambiar de diseño al volcarse hacia adelante, en posición contraria a la actual. Los cambios necesarios ya son conocidos en Maranello, puesto que los encargados del motor de Sauber son los propios ingenieros del Cavallino.
El cambio de formas, posición y uso de los escapes servirá también a realizar las nuevas tomas de aire y pontones laterales que deben albergar unos nuevos radiadores que eliminen el problema de resistencia al avance que sufre el coche de Alonso y Massa debido a la radical y equivocada disposición de los elementos radiantes del proyecto original.
Ferrari apunta por completo a la parte trasera, que será probada de forma previa a los test del Mugello, antes de plantearse cambios radicales en la parte frontal que podrían afectar a las suspensiones delanteras, en espera de que esto último no sea necesario para recobrar la ausencia de competitividad del Ferrari de esta temporada.
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